ACERCATE Y SIENTATE UN RATO, ESTÁS EN LA TABERNA DEL MONO ROJO, AQUÍ TODA ILUSION ES POSIBLE.

ACERCATE Y SIENTATE UN RATO, ESTÁS EN LA TABERNA DEL MONO ROJO, AQUÍ TODA ILUSION ES POSIBLE.
Casi sin pensarlo nos fuimos sentando, uno tras otro, en torno a la chasca que encendió el Cipri, y asi pasamos la noche, escuchando las historias que alguien, no se quien, cualquiera que fuese, narraba despacito, creando un entorno de magia y misterio del que no queríamos salir.

QUE LA POESIA NOS SALVE DEL MUNDO

QUE LA POESIA NOS SALVE DEL MUNDO
LO IMPOSIBLE SOLO EXISTE EN TU VIDA

sábado, 31 de diciembre de 2011

NO SE ACABAN LOS SUEÑOS EN LA ÚLTIMA NOCHE DEL AÑO



Mira, no pido mucho,
solamente tu mano, tenerla
como un sapito que duerme así contento.
Necesito esa puerta que me dabas
para entrar a tu mundo, ese trocito
de azúcar verde, de redondo alegre.
¿No me prestás tu mano en esta noche
de fìn de año de lechuzas roncas?
No puedes, por razones técnicas.
Entonces la tramo en el aire, urdiendo cada dedo,
el durazno sedoso de la palma
y el dorso, ese país de azules árboles.
Así la tomo y la sostengo,
como si de ello dependiera
muchísimo del mundo,
la sucesión de las cuatro estaciones,
el canto de los gallos, el amor de los hombres.

(Julio Cortazar)


El año acaba como nunca hubiera pensado. La taberna hoy se llenó de luz, tímida en su comienzo intensa al poco, pues acaba el año no como empezó, pues los colores de mis sueños invaden las paredes del deseo intenso de verla feliz, lejos del gris oscuro de la agónica ausencia de alegría, y se que se puede, se que se sale, como alas de mariposa alejándose de la noche volando hacia primaveras floridas donde aún, en un antiguo camino convertido ahora en carretera, un viejo tronco de árbol que busca intensamente agua entre el nuevo asfalto guarda entre su corteza la cicatriz de un machetillo que grabó dos nombres encerrados en un sortilegio que dura hasta ahora mismo, último día de hace treintaytantos, y que invencible se deja leer para las parejas que aún hoy osan acercarse a la vieja estación.
Necesitaba esa puerta, como Julio Cortazar en su poema, que me dabas para entrar a tu mundo, y a través de ella me acerco a tí cada dia en los planos del alma alejados de la realidad, y siempre vuelvo con ganas de ver nacer el nuevo día para seguir pensando en tí, en mi y en nuestra historia, increible historia.

Feliz año nuevo con energías renovadas y el mismo ansía de encontrarte en cada rayo de luz al amanecer, en cada pétalo de la flor salvaje que crece en la ciudad, libre de cuidados especiales de jardineros adiestrados en químicos y venenos, en el olor de la lluvia al empezar a empapar las calles y en el sentimiento recogido al buscar el refugio del chaquetón al subirme el cuello protegiéndome del frío seco que aquí se adentra en cada bocanada de aire.

Feliz año, feliz vida.

viernes, 30 de diciembre de 2011

...DESTERRANDO LA NEGRURA DE LA GÉLIDA NEGACIÓN DEL SER, DEL ESTAR, DEL VIVIR Y DISFRUTAR ...



Muy cerca de mi ocaso, yo te bendigo, Vida,
porque nunca me diste ni esperanza fallida,
ni trabajos injustos, ni pena inmerecida;
porque veo al final de mi rudo camino
que yo fui el arquitecto de mi propio destino;
que si extraje la miel o la hiel de las cosas,
fue porque en ellas puse hiel o mieles sabrosas:
cuando planté rosales coseché siempre rosas.

Cierto, a mis lozanías va a seguir el invierno:
¡mas tú no me dijiste que mayo fuese eterno!

Hallé sin duda largas las noches de mis penas;
mas no me prometiste tan sólo noches buenas;
y en cambio tuve algunas santamente serenas...

Amé, fui amado, el sol acarició mi faz.
¡Vida, nada me debes! ¡Vida, estamos en paz!


(Amado Nervo)




 

Se van las nubes, me cuentan, que convierten tus días en noches, y la luz parece que empieza, abriéndose paso entre la oscura tortura de la mente confundida, a invitar a los colores a salir de sus refugios, invadiendo de esperanza lo que antes fue campo abonado a la tristeza de una celda de barrotes ideados.

La alegría invade lo que antes era opaco, gris, tenebroso y preocupante. Alegría por que hay salida ya que llega aire fresco de algún sitio, avisando que la cueva tiene entrada y nada ni nadie prohibe salir por donde se accedió al frío invierno del alma.

Mensajera, querida mensajera, mi deuda es eterna hacia ti al anunciarme la luz de la mañana al final de la noche oscura; infinito mi agradecimiento al indicarme que ya súrgió la chispa que encenderá la tea que conducirá la luz a las tinieblas de la mente.

Que buen final de año, maravilloso final de año este, que anuncia recuperación de colores desterrando la negrura de la gélida negación del ser, del estar, del vivir y disfrutar de lo que nos rodea. Que buena manera de terminar el año, que buena noticia. Oler, saborear, ver, oir, vivir. Maravillosa noticia.


martes, 27 de diciembre de 2011

...Y SENTIR EL RASGUEO DE LAS CUERDAS...




La guitarra
hace llorar a los sueños.
El sollozo de las almas
perdidas
se escapa por su boca
redonda.
Y como la tarántula,
teje una gran estrella
para cazar suspiros,
que flotan en su negro
aljibe de madera.
(Federico García Lorca)





Cada cuerda es una arteria directa del corazón, y son los latidos acelerados al soñar contigo los que unidos conforman la canción más hermosa del mundo, aquella que solo escuchan dos personas en la distancia, unidos por esa extraña y permanente música que hace años me acompaña y me emociona al disfrutar y sentir el rasgueo de las cuerdas por sentimientos y sueños.

jueves, 22 de diciembre de 2011

MI PRINCIPIO Y MI FIN




Hoy la alegría de saber se enfrentó a la certeza del saber. Abandonada en la cama, sin ganas de salir, sin querer levantarse...triste situación para quien siempre fue luz en la que refugiarme en la soledad de mis sueños no cumplidos. La certeza ha de convertirse en resolución, en fuerza para que las sábanas no atenacen secuestrando más la mente de quien me enseño a amar, a querer, a vivir, poque aún en la distancia el combustible de mi travesía siempe fuiste tu, nada más que tu

Hay que remontar esas olas que vientos grises y negros levantan sobre tu firmeza poniendo en peligro la estabilidad la nave, porque si tu caes yo me hundo en la negrura de ese océano de tristeza y desilusión, abandonándome a lo que ocurra, y por ti, por mi, por nosotros, no dejaré que la tormenta desgarre las velas que mantuvieron las fuerzas de este viejo mástil, que sin romperse volverá a ver como un día soleado las blancas y largas telas se curvarán con el aire para volver a poder viajar a esa luna en la que bailamos un día, ¿recuerdas como lo narré?, pues volveremos a, con mi brazo sobre tu talle, a deslumbrar a esas traviesas y algo envidiosas estrellas que compiten con tus ojos en luminosidad y belleza.

Quemaremos las sábanas, las mantas, la cama entera, pero has de salir, de navegar de nuevo en nuestro particular mar de sueños e ilusiones. Seguro, porque ya mi mano firme agarra el timón y solo espera que se leven anclas. Porque tu, eres mi principio y mi fín.

domingo, 4 de septiembre de 2011

...ANDO PERDIDO ENTRE SIES Y NOES, ENTRE DESEOS Y RENUNCIAS, ENTRE...


Amor de mis entrañas, viva muerte,
en vano espero tu palabra escrita
y pienso, con la flor que se marchita,
que si vivo sin mí quiero perderte.

El aire es inmortal. La piedra inerte
ni conoce la sombra ni la evita.
corazón interior no necesita
la miel helada que la luna vierte.

Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,
tigre y paloma, sobre tu cintura
en duelo de mordiscos y azucenas.

Llena, pues, de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
(Federico García Lorca)


Se aproxima la hora del regreso a los inicios, la vuelta al comienzo del camino y mientras una espesa niebla se apodera de mi mente impidiéndome la fluidez de pensamiento al tiempo me pregunto si tu, TU, esperas algo.

Quizás, como hace años, te aproximes y pegada tu nariz en el cristal mires al interior del local buscando con tus ojos mi figura, o te embarques en interminables paseos por la calle, sabiendo que por ahí tendré que llegar alguna vez. O peor, quizás ni sepas del encuentro, y si sabes no encuentres los motivos suficientes para pasarte, curiosa, por si acaso estoy allí.

No es peor la espera sino la incertidumbre de si voy o no voy, si te veo o no te veo. Esa niebla que me impide ver con claridad lo que el corazón, tirano, impone. Aún ando perdido entre sies y noes, entre deseos y renuncias, entre el encuentro o la huida.

¿Que me espera si acudo al viejo escenario de la juventud pasada? ¿Será como otras veces en las que las citas pactadas cumplieron ansiedades liberadas? No se, en esta ocasión la llamada es indirecta, no contigo ni por ti, pero si en tu teatro, en tu escenario, en tus calles, en ese aire que respiras, y yo no puedo, no quiero, separar las situaciones.

Horrible, la niebla sigue avanzando mientras el reloj, insobornable, continua marcando, tic, tac, tic, tac, tic, t.....

viernes, 1 de abril de 2011

LLUEVEN PENAS DE OTROS QUE SALPICAN, Y EL GRANIZO DE DISGUSTOS NO BUSCADOS...


Sí, tu niñez ya fábula de fuentes.

El tren y la mujer que llena el cielo,

tu soledad esquiva en los hoteles

y tu máscara pura de otro signo.

Es la niñez del mar y tu silencio

donde los sabios vidrios se quebraban,

es tu yerta ignorancia donde estuvo

mi torso limitado por el fuego.

Norma de amor te di, hombre de Apolo,

llanto con ruiseñor enajenado,

pero, pasto de ruina, te afilabas

para los breves sueños indecisos.

Pensamiento de enfrente, luz de ayer,

índices y señales del acaso.

Tu cintura de arena sin sosiego

atiende sólo rastros que no escalan,

pero yo he de buscar por los rincones

tu alma tibia sin ti que no te entiende,

con el dolor de Apolo detenido

con que he roto la máscara que llevas.

Allí, león, allí, furia del cielo,

te dejaré pacer en mis mejillas;

allí, caballo azul de mi locura,

pulso de nebulosa y minutero,

he de buscar las piedras de alacranes

y los vestidos de tu madre niña,

llanto de media noche y paño roto

que quitó luna de la sien del muerto.

Sí, tu niñez ya fábula de fuentes.

Alma extraña de mi hueco de venas,

te he de buscar pequeña y sin raíces,

¡Amor de siempre, amor, amor de nunca!

¡Oh, sí! Yo quiero. ¡,Amor, amor! Dejadme.

No me tapen la boca los que buscan

espigas de Saturno por la nieve

o castran animales por un cielo,

clínica y selva de la anatomía.

Amor, amor, amor. Niñez del mar.

Tu alma tibia sin ti que no te entiende.

Amor, amor, un vuelo de la corza

por el pecho sin fin de la blancura.

Y tu niñez, amor, y tu niñez.

El tren y la mujer que llena el cielo,

Ni tú, ni yo, ni el aire, ni las hojas.

Sí, tu niñez ya fábula de fuentes.

 
Federico García Lorca, (Poema de la soledad).
 
 

Y aunque el camino en ocasiones es duro, llueven penas de otros que salpican, y el granizo de disgustos no buscados golpea con fuerza la moral del caminante, no se deja de andar, ni por escollos oscuros que atraviesan la senda ni por barreras, aparentemente imposibles de saltar y que luego se deshacen con el salto.

Nadie nos dijo como sería el camino, si difícil de seguirlo, si suave como el algodón de una alfombrilla de niño. Nos encontramos en ruta sin conocer a donde vamos, sin saber que nos dirige irremediablemente hacia delante, y de golpe, salvadas todas las fronteras, vencidos todos los límites, divisamos la luz que nos guió desde el principio descubriendo que aún hay fuerzas para vivir la experiencia de la meta que simboliza el faro solitario.


lunes, 28 de marzo de 2011

....ERES TU MI AVEMARÍA, ERES TU MI RELIGIÓN...

Yo ya no se como mirarte para que en mis ojos tu puedas leer lo que soy capaz de amarte.

Y ya no se que hacer conmigo para parecerme al tipo de tus sueños y escaparme de tu olvido.

No se a quien pedir ayuda ni que camino coger, a que santito rezarle ni que amuleto tener, eres mi mayor mania una divina obsesion eres tu mi ave maria, eres tu mi religion.

Perdóname, si a veces rompo tu calma de tanto llamarte, de tanto nombrarte, de tanto mirarte.

Pero es que quiero que me quieras a mi na mas que la alegria se me acaba si tu no estás, porque a tu lado se hace grande mi corazón, porque sin ti soy un problema sin solucion.

Ai que yo quiero que me quieras a mi na mas que la alegria se me acaba si tu no estás, porque a tu lado se hace grande mi corazón, porque contigo mi guitarra suena mejor. Suena mejor.

Y ya no se, como expresarme para que en mis frases quepa la pasion y la emocion de contemplarte.

No soy capaz de comprenderte cuando dices que en tu vida no hacen falta cuerdecitas que la aprieten.

No se a quien pedir ayuda ni que camino coger, a que santito rezarle ni que amuleto tener, eres mi mayor mania una divina obsesion eres tu mi ave maria, eres tu mi religion.

Perdóname, si a veces rompo tu calma de tanto llamarte, de tanto nombrarte, de tanto mirarte.

Pero es que quiero que me quieras a mi na más que la alegria se me acaba si tu no estás, porque a tu lado se hace grande mi corazón, porque sin ti soy un problema sin solucion.

Ai que yo quiero que me quieras a mi na más que la alegria se me acaba si tu no estás, porque a tu lado se hace grande mi corazón, porque contigo mi guitarra suena mejor. Suena mejor.

Porque a tu lado se hace grande mi corazon, porque a contigo mi guitarra suena mejor.

Pero es que quiero que me quieras a mi na más que la alegria se me acaba si tu no estás, porque a tu lado se hace grande mi corazón, porque sin ti soy un problema sin solucion.

Ai que yo quiero que me quieras a mi na más que la alegria se me acaba si tu no estás, porque a tu lado se hace grande mi corazón, porque contigo mi guitarra suena mejor.

Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.
Yo quiero que me quieras a mi na ma.






Recuerdo ahora la pintada a la puerta de la facultad, "tengo celos hasta del aire que respira..." y creo que nunca tuve celos del aire que respirabas, pues el aire nos unía, como la mirada nocturna a la luna nueva, grande, inmensa, la misma que, desde esta parte desde siempre castellana y ahora, por eso de la política solitaria Madrid, refleja su luz al tiempo en esos aires del Sur, en esa Málaga profunda, donde el olor a aceite se mezcla en mi interior con el de la cal en las paredes y el recuerdo de tu pelo perfumado.

Ahora, mientras me llamas, los fantasmas del pasado vuelven, juguetones, a traerme tu imagen, y la mía de entonces, haciendo que el despertar sea doloroso al alejarme de tí en el calorcito de la noche y contemplar en el espejo la obra de los años pasados en lejanía, en furtivas visitas y temblorosas cartas con remites de iniciales.

Y si pienso detenidamente, tu has sido siempre "mi avemaría, mi religión", la que me hacía levantarme en las mañanas y vivir apurando cada momento hasta el último trago dando gracias por el nuevo día, por los minutos vividos y los por vivir. Dando gracias por saber fijarme en cada pequeño milagro, en apreciar los colores del hastío en verano y de la tormenta salvaje en invierno. Por solazarme con el tono multicolor del otoño y relajarme disfrutando con las gotas de lluvia en la ventana. Por conocer a gentes nuevas y beber de otros "amores", por no arrepentirme nunca de nada de lo que hice y sentir que las horas tenían pocos minutos para poder disfrutar de todo lo que la vida ofrece.

Creo que lo aprendí de tí, que me enseñaste a apreciar el presente sin olvidar el pasado, preparándome para el siguiente minuto que aún no llegaba pero que ya presentía como intenso y único, como cada uno de ellos. Aprendí a amar la vida y lo que ofrece, y que nunca un segundo era igual a otro, que había que sacar lo máximo de cada uno sabiendo que lo maravilloso no se acaba nunca y que no hay tiempo para vivirlo todo. Que hay que cerrar los puños e intentar tomar el máximo de lo que nos rodea, aprendiendo de todo, de todos, y negando siempre que el gris apague al resto de los colores. Porque como dice la canción del Arrebato pero cambiando la oración al pasado, "a tu lado se hizo grande mi corazon, porque contigo mi guitarra sonó mejor".

Siempre agradecido, eternamente agradecido.
.

domingo, 13 de febrero de 2011

VIEJO TRONCO SOLIDARIO


En algún lugar, en algún camino hacia alguna antigua estación hay grabado en la piel de un árbol un corazón con dos nombres, el tuyo y el mío.

Al igual que cuando lo hicimos con la punta de una navaja, supongo, o quizás de alguna llave, no recuerdo, nacido de una tarde en la que el atardecer, por la magia de los sentimientos, convirtiose en amanecer de lo que años pasados continua presente, ha ido transformándose al tiempo que el tronco, como la vida, fue creciendo dejando el hueco de los magos unidos en su interior.

Brecha en la madera de un intercambio de sueños, de ilusiones, ¿Donde estarás, viejo testigo nuestro, en que carretera de estación transformada por la extensión del ladrillo y la azotea, de manera que ya no te encuentro cuando busco y me pierdo en el nuevo laberinto de casas y calles, antes campos arados y lejanos por donde andábamos escondidos de maliciosas miradas entre visillos de ventanas?

Seguramente des ahora sombra en alguna calle que invadió tu espacio, y en estos años, empujados por nuestra marca, nuevas ilusiones se plasmaran en tu apergaminado tronco y que quizás alguien lea, curioso por desentrañar viejos amores de los que quedan los recuerdos y las señales con que tatuamos tu cuerpo, eligiéndote testigo serio y formal de nuestras promesas y sueños.


Quizás también ahora, hoy, algún chico metiendo su mano en el bolsillo sacara la herramienta necesaria para sellar su compromiso entre tus arrugas y nudos. Viejo notario de amores, si hablaras, si moviendo como brazos tus ramas pudieras señalar las promesas incumplidas, los amores que bajo tu abrazo se besaron después de escribir en tu libro abierto a todos. Te recuerdo, viejo árbol, morera que con su sabia derramada por la herida abierta de esperanzas grabadas, te convertiste en mudo cómplice del secreto, en silencioso testigo solitario en el camino de la estación donde paró nuestro tren cargado de aventureros dedos temblorosos que ansiaban descubrir caminos nuevos en el amanecer de nuestras entonces jóvenes vidas.

Viejo tronco solidario, guardian insobornable de secretos, mis saludos, mis recuerdos.

viernes, 28 de enero de 2011

TE BUSCO ENTRE EL SONIDO DEL UNIVERSO Y TE ENCUENTRO




La Música, ese lenguaje universal que nos refleja e informa al otro de los sentimientos que queremos transmitir, sentimientos que quizás la mirada no nos permita comunicar, pero que las notas enlazan directamente con el corazón del otro, haciendo que nos miremos directamente con el alma, caminando un poco más lejos, transportándonos a ese lugar en el que sobran las palabras y basta con la música para la intensa unión entre dos almas que se encuentran.

Y cuantas veces en la soledad descubrimos que la música nos elige como destinatarios de su mensaje, permitiendo el descenso hacia nosotros mismos, descubriendo nuevos personajes que habitan en nuestro interior y que desconocíamos que formaran parte de nuestra manera de sentir, de obrar, de amar.

Pasando al otro lado, cruzando la barrera física de lo material, que perfección se encuentra en el eter en el que flotan los espíritus de aquellos que nos precedieron marcando el camino de los que antes que nosotros anduvieron por esa senda, marcando el camino de los que lo andarán después de que nosotros cambiemos de plano.

La música me lleva a tí, me acerca a tí en cada nota; eres tu en los matices distintos que percibo. Te busco entre el sonido del universo y te encuentro, tal vez porque ésta que escucho sea la verdadera música del alma, la música de las esferas, la música del universo eterno, la música que todo lo mueve, en la que todos nos movemos, en la que vivimos si cruzamos el espejo. Tal vez sea tu nombre el que escucho entre instrumentales notas, tal vez sea tu imagen la que veo entre adaggios y minuetos, quizás seas tu, por fín tu.