A los que me quisieron y a los que no, a los que me ignoraron pensando que me hacían daño. A los que con sus buenos ejemplos me enseñaron que nunca debía seguir sus pasos; a los "crápulas" y golfos que insistieron en que aprendiera que la vida es maravillosa y merece la pena vivirla intensamente. A los que me protegían y a los que buscaban dañarme; a aquellos de los que aprendí y también de los que no pude, aunque juro que lo intenté, aprender nada. A los buena gente, a la mejor gente y muy especialmente a la "mala gente" según los cánones invertidos de la sociedad. A la vida, de la que abusé tanto (y ella se dejaba divertida), a todos, de corazón, (no fiaros mucho), ETERNAMENTE AGRADECIDO.
viernes, 26 de septiembre de 2008
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1 comentario:
gracias a tí por estar siempre.
Manuela
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