Quizás algún día tenga el valor suficiente para preguntar cuantas veces nos vimos en tu recuerdo y no en el mío

No sé si aún me recuerdas,nos conocimos al tiempotú, el mar y el cieloy quién me trajo a ti .Abrazaste mis abrazosvigilando aquel momento,aunque fuera el primero,lo guardara para mí. Si pudiera volver a nacerte vería cada día amanecersonriendo como cada vez,como aquella vez. Te voy a escribir la canción más bonita del mundo,voy a capturar nuestra historia en tan solo un segundo.Y un día verás que este loco de poco se olvida,por mucho que pasen los años de largo en su vida. El día de la despedidade esta playa de mi vidate hice una promesa:volverte a ver así. Más de cincuenta veranoshace hoy que no nos vemosni tú, ni el mar ni el cieloni quien me trajo a ti. Si pudiera volver a nacerte vería cada día amanecersonriendo como cada vez,como aquella vez. Te voy a escribir la canción más bonita del mundo,voy a capturar nuestra historia en tan solo un segundo.Y un día verás que este loco de poco se olvida,por mucho que pasen los años de largo en su vida.

Artista: La Oreja De Van Gogh
Album: El Viaje de Copperpot
Canción: La playa

Y es verdad. Si pudieramos ver el contador de la vida veríamos las veces que he estado contigo sin estarlo, las veces que has estado conmigo estando ausente. No han pasado cincuenta años como en la canción, pero si muchos, muchos. No los bastantes para hacer que en mi memoria exista un hueco, un vacío que serías tu. Estás como cada día, como siempre, ahí, conmigo en el rincón que elegimos al separarnos, el rincón de mis recuerdos.

A veces, después de años, apareces realmente y nos vemos, hablamos, nos abrazamos, cargando baterías que alimentarán la memoria durante otros años de ausencia, años de citas clandestinas en la intimidad de mis sueños.

Quizás algún día tenga el valor suficiente para preguntar cuantas veces nos vimos en tu recuerdo y no en el mío. ¿Nunca, alguna, muchas? ¿Tu también sueñas que bailamos en la Luna, que miramos el amanecer con la rabia de saber que es despedida, con la duda de no saber cuando volver a encontrarnos en esos campos perdidos del subconsciente? Tampoco me gustaría saberlo, ni en un sentido ni en otro, ¿Para qué? prefiero vivir el momento del encuentro furtivo al que en complicidad me lleva el sueño. Me conformo con eso, esperando que pasen los años y tal vez, si nada ocurre, volver a verte.